El masaje descontracturante ayuda a aliviar el dolor y la tensión muscular, mejora la circulación sanguínea y reduce el estrés da mas felixibilidad y ayuda a sentirse mejor para realizar actividades contidinanas con más ligereza.

El masaje relajante se enfoca en inducir la relajación profunda, mientras que el masaje antiestrés busca reducir la ansiedad y el nerviosismo.

Los masajes regulares son una excelente forma de cuidar tu cuerpo y mente. Ayudan a aliviar el estrés, mejorar la circulación, reducir la tensión muscular y promover la relajación. Además, los masajes frecuentes contribuyen a una mejor postura, reducen el riesgo de lesiones y fomentan el bienestar general. Incorporar esta práctica en tu rutina puede mejorar significativamente tu salud física y emocional, brindándote más energía y un equilibrio interno. ¡No subestimes el poder de un buen masaje!

Una contractura es una contracción involuntaria y sostenida de un músculo o grupo de músculos, que provoca rigidez, dolor y limitación en el movimiento de la zona afectada. Las contracturas pueden ocurrir por diversos motivos, como malas posturas, esfuerzo físico excesivo, estrés, o movimientos repetitivos.

Para aplicar calor en una contractura, puedes usar una bolsa de agua caliente, una almohadilla térmica o una toalla mojada en agua caliente. Aplica el calor durante 10 a 15 minutos en la zona afectada. Puedes repetir varias veces al día, pero evita usarlo si hay inflamación reciente, ya que el frío sería más adecuado en ese caso. El calor ayuda a relajar los músculos tensos y mejorar la circulación, aliviando el dolor y la rigidez.